Una nueva investigación de periodistas alemanes revela "varias pistas nuevas en dirección de Ucrania" ligadas a un yate que las autoridades ya están analizando en relación con el sabotaje de los gasoductos Nord Stream en septiembre del año pasado, recogen medios locales.

La pesquisa, realizada de manera conjunta por Norddeutscher Rundfunk (NDR), Westdeutscher Rundfunk (WDR), el periódico Süddeutsche Zeitung, entre otros medios internacionales, conducen al yate de vela Andrómeda, que ya fue vinculado a las explosiones en investigaciones similares de marzo.

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Según los informes, un grupo de cinco hombres y una mujer con pasaportes búlgaros y rumanos falsos partieron del puerto de la ciudad alemana de Rostock en la embarcación de 15 metros de largo, que supuestamente fue alquilada por una agencia de viajes llamada Feeria Lwowa en Varsovia (Polonia), pocas semanas antes de que se llevaran a cabo las explosiones.

Se cree que la empresa, registrada en 2016 por dos ciudadanos ucranianos, se usó para camuflar la operación. Al parecer, la firma no tiene número de teléfono ni sitio web ni empleados, y no ha tenido una facturación significativa durante años. Sin embargo, en 2020 recibió alrededor de 2,8 millones de euros (3 millones de dólares) sin justificación.

En principio, una mujer de 55 años de edad, que vive en Kiev (Ucrania), fue nombrada presidenta de la compañía, pero se cree que ella también podría haber servido como testaferro.

El Andrómeda, que atracó días previos al sabotaje en el puerto deportivo de Christianso, una pequeña isla danesa al noreste de Bornholm, cerca de donde estallaron las tres bombas, fue encontrado con rastros de explosivos descritos por los investigadores como "militarmente útil y apto para uso submarino".

Los servicios de seguridad alemanes también encontraron otro "rastro" que conducía a las Fuerzas Armadas de Ucrania. Entre los seis miembros de la tripulación, se encontraba un hombre de unos 20 años, que sirvió anteriormente en una unidad de infantería del Ejército ucraniano. El sospechoso supuestamente tiene dos tatuajes llamativos.

Los investigadores alemanes, además, afirmaron que no hay evidencia de que buques de guerra rusos estuvieran involucrados en el sabotaje de los gasoductos y también se inclinan hacia la versión que involucra a Kiev, según fuentes consultadas por The Times.

• El 27 de septiembre de 2022, informaron graves daños en tres de los cuatro gasoductos de los Nord Stream 1 y 2. Más tarde, sismólogos suecos dijeron que habían identificado dos explosiones en aguas neutrales en el lecho marino del mar Báltico durante la noche del 26 de septiembre. Las estructuras estaban fuera de servicio en ese momento, pero llenas de gas.

"Una historia de tapadera"

La citada versión del incidente fue publicada semanas después de la difusión de la investigación del legendario periodista Seymour Hersh, que reveló que la Casa Blanca estaba detrás del atentado. Además, en su artículo, indicó que buzos de la Armada estadounidense colocaron los explosivos en los gasoductos Nord Stream en junio de 2022 bajo la cobertura de los ejercicios BALTOPS 22 de la OTAN.

En este sentido, dijo que la versión difundida en medios occidentales fue elaborada con participación de la CIA y de la Inteligencia de Alemania como "una historia de tapadera".

Por su parte, desde Moscú señalaron que los periodistas norteamericanos "siguen elaborando deliberadamente versiones falsas sobre el atentado contra infraestructuras energéticas críticas en el mar Báltico", inventando "historias 'fantásticas'" sobre individuos que organizaron un operativo "tan complejo" desde un "yate" alquilado.

"Está claro para cualquier persona razonable que solo ciertos Estados con determinadas tecnologías pueden preparar y llevar a cabo un acto terrorista de este tipo", reza un comunicado de la Embajada rusa en Washington publicado en marzo.