La ciudad de Sudzha fue la mayor localidad que las FF.AA. de Ucrania lograron ocupar durante su incursión en territorio ruso en agosto pasado. Su liberación tiene una gran importancia para el avance consecutivo en la liberación total de la provincia de Kursk, ya que servía de principal centro logístico a través del cual el régimen de Kiev abastecía a sus unidades en la zona.

• Ubicación estratégica
• Importancia económica
• 'Moneda de cambio'

Ubicación estratégica

Fundada en 1661, Sudzha está localizada en el suroeste de la provincia rusa de Kursk, a unos 10-11 kilómetros por carretera de la frontera ucraniana y a unos 100 kilómetros del cetro administrativo provincial.

La urbe —donde para enero de 2024 residían poco menos de 5.000 personas— es un importante centro de transporte: a través de Sudzha pasa una autopista regional que atraviesa la frontera con Ucrania y va a la ciudad ucraniana de Sumy; así como varias carreteras locales. Asimismo, por la localidad pasa una línea ferroviaria que también tiene una gran importancia para el abastecimiento de tropas.

Debido a este desarrollado sistema de transporte, las fuerzas de Kiev utilizaban a Sudzha como su principal centro logístico para abastecer a todas sus unidades desplegadas en las localidades cercanas en la provincia de Kursk. 

Importancia económica

Sudzha también tiene una gran importancia económica, ya que a pocos kilómetros de la ciudad se encuentra la estación de medición de gas del mismo nombre: la única por la que Rusia estuvo transportando en el último tiempo gas a Europa a través de Ucrania.

El funcionamiento de la estación Sudzha fue interrumpido el 1 de enero de este año, debido a la negativa del líder del régimen de Kiev, Vladímir Zelenski, a prorrogar el contrato de tránsito de gas ruso con la empresa Gazprom.

Cabe mencionar que justamente el gasoducto vacío que lleva a Sudzha fue clave en el histórico operativo de las fuerzas rusas denominado extraoficialmente 'Flujo' o 'Truba' (Tubería, en español), que resultó con liberación de nuevas localidades y territorios en esa provincia.

Cientos de militares rusos caminaron más de 15 kilómetros por el conducto subterráneo para atacar por sorpresa las líneas enemigas en el distrito de Sudzha desde la retaguardia.

'Moneda de cambio'

El presidente ruso, Vladímir Putin, explicó meses atrás que la incursión de las tropas de Kiev en la provincia rusa de Kursk perseguía motivos políticos, así como buscaba detener la exitosa ofensiva de las Fuerzas Armadas de Rusia en Donbass y prolongar aún más las hostilidades para no levantar la ley marcial impuesta en Ucrania.

"Сuando se levante la ley marcial, será necesario celebrar inmediatamente elecciones presidenciales, y está claro que las actuales autoridades no están preparadas para ello. Tienen pocas posibilidades de ser reelegidas. Y por eso no les interesa un alto el fuego", afirmó. Putin también subrayó que el régimen de Kiev no había logrado ninguno de sus objetivos.

Además, Zelenski intentaba aprovechar su incursión en la provincia de Kursk como una 'moneda de cambio' para fortalecer su posición en posibles negociaciones con Rusia o simplemente realizar un intercambio directo de territorios ocupados en esta región por alguno de los que pasaron a formar parte del país euroasiático.

"Intercambiaremos un territorio por otro", dijo Zelenski en una entrevista.

No obstante, el avance del Ejército ruso hacia la frontera y, a la vez, en la provincia de Sumy llevó a la destrucción del sistema logístico ucraniano en esta zona e hizo imposible mantener a las fuerzas de Kiev en Sudzha. Esto obligó a las tropas ucranianas a huir en masa —por la 'carretera de la muerte'— aun antes de la completa liberación de la urbe por el Ejército ruso.

A finales de febrero, Vadim Koziulin, investigador jefe del Centro de Estudios Militares y Políticos de la Academia Diplomática rusa, adelantó que "las FF.AA. de Ucrania tendrán que abandonar" Sudzha.

"Y en el momento en que se vayan, la Oficina de Zelenski perderá 'la moneda de cambio' que ha conservado durante mucho tiempo para chantajear a Moscú. Este hecho por sí solo fortalecerá significativamente la posición negociadora de Rusia", señaló.